La moda sostenible está siendo cada vez más valorada en la sociedad actual y, por eso, es importante saber cómo preservar el color natural de la ropa teñida. En este artículo, te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre la genética de las fibras y los procesos de teñido para poder cuidar tus prendas de forma efectiva y sostenible.
Genética de las fibras textiles
Las fibras textiles están compuestas por moléculas de proteínas, celulosa o polímeros sintéticos que se entrelazan entre sí para formar un hilo. Cada fibra se diferencia por su estructura molecular, que determina su aspecto, resistencia y elasticidad.
La lanolina, por ejemplo, es una proteína presente en la lana que le da su resistencia y suavidad características. La celulosa, que se encuentra en el algodón y la viscosa, es una molécula que forma largas cadenas que se entrelazan para originar una fibra flexible y resistente. En cambio, el poliéster es un polímero sintético que se caracteriza por su gran resistencia a la abrasión y su capacidad para retener el color.
Teñido de fibras textiles
El teñido es uno de los procesos más importantes en la industria textil, ya que permite añadir color y estampados a las prendas. Sin embargo, es un proceso que consume mucha agua y energía, además de provocar residuos contaminantes que son difíciles de tratar.
Existen diferentes técnicas de teñido, como el teñido en pieza, que se realiza antes de cortar y confeccionar las prendas, y el teñido en prenda, que se hace después de la confección. También podemos encontrar la técnica del batik, que consiste en teñir con cera ciertas partes de la prenda para crear estampados distintivos.
Cabe destacar que, en algunos casos, se utilizan tintes naturales extraídos de plantas, frutas o minerales, que no dañan el medio ambiente y ofrecen una alternativa más sostenible a los tintes químicos.
Cómo preservar el color natural de la ropa teñida
Uno de los mayores desafíos a la hora de cuidar la ropa teñida es evitar que el color se pierda con los lavados. Para ello, es necesario seguir ciertos cuidados que aseguren una buena conservación de la prenda.
1. Lavado adecuado
Es recomendable lavar la prenda a mano y no usar blanqueadores ni detergentes con agentes blanqueantes, ya que pueden desgastar el color de la prenda. También es importante lavar la prenda del revés y a una temperatura adecuada (preferiblemente, en agua fría o tibia), ya que así evitaremos que el color se desvanezca.
2. Secado
El secado al sol puede dañar la prenda y hacer que el color se desvanezca con el tiempo. Es mejor secar la ropa a la sombra y del revés, para que no pierda su color original.
3. Planchado
El exceso de calor en la plancha puede degradar el tejido de la prenda y hacer que el color se decolore con el tiempo. Para evitarlo, es recomendable planchar la prenda a baja temperatura y con el tejido del revés.
4. Organización de la ropa
Además de los cuidados específicos, es importante organizar la ropa para que el color no se transfiera entre prendas durante el lavado. Para ello, es recomendable separar la ropa por colores y lavar cada grupo por separado.
En definitiva, cuidar la ropa teñida es clave para que nuestras prendas duren más tiempo y se mantengan en buen estado. Siguiendo unos sencillos consejos, podremos preservar el color natural de nuestras prendas y contribuir a la moda sostenible.